El sol se prende y se apaga en las olas
los juncos juntan basura
un viejo con las patas en el agua sostiene una caña
los barcos esperan entrar a puerto
clavo un palo en la orilla para medir la marea
un halcón peregrino se para en el palo
no le importa el río sino lo que deja
es lo que pienso del halcón sin saber lo que piensa
tampoco se lo que piensa el viejo
pienso que ellos imaginan lo que pienso
se preguntan para qué clavé un palo
qué hago en la orilla
qué pienso
o no les importa
ni yo
ni el palo
menos lo que pienso
a mi
tampoco me importan
sólo miro el río
se acerca y se aleja del palo
no sé
si el agua cubre la tierra
si la tierra se mete debajo del agua
si el agua se lleva algo de tierra
si la tierra se chupa algo de agua
no sé
no me importa
ni el sol ni las olas ni los juncos ni la basura
ni el viejo ni los barcos ni el halcón ni el palo
mientras
en la orilla
con una ramita seca
escribo tu nombre.