Confesionario

La luz
no es mucha
piso con cuidado
está mojado
algo pegajoso
y a la vez
resbaladizo
el olor
me hace
llorar los ojos
el mingitorio
en el borde
tiene costra
amarilla
no corre el agua
sólo
el pis se siente
correr
por el desagüe
hay unas puertas
que no me animo
abrir
no quiero
lo que hay
jamás entraría
me doy vuelta
no intento
lavarme las manos
me miro al espejo
que está lleno
de manchas oscuras
y salgo
con la misma
sensación de alivio
que siento
cuando miento.

Eddy Merckx

Rodado 18 con rueditas rodado 18 sin rueditas rodado 20 multiuso rodado 28 pedalear de pibe pedalear de chiquito pedalear de joven y seguir pedaleando kilómetros y kilómetros por día buscar la velocidad la técnica pedalear agachar la cabeza y pedalear resistir kilómetros pedalear pararse en los pedales embalar tomar velocidad ser el mejor ser el campeón ser el más fuerte ser el más veloz pedalear pararse en los pedales mirar hacia abajo mirar las masas que giran los rayos no se ven sólo se ve el brillo y mirar el estén el manubrio y las manos aferradas las venas hinchadas de los antebrazos y las zapatillas que dan vueltas y las patas que suben y bajan y la caja pedalera que se mueve con un tenue balanceo mientras las palancas giran a su alrededor el cemento pasa turbio se escuchan rugir los tubos inflados infladísimos el ruido de la cadena el ruido a la respiración pedalear pedalear girar las patas lo más rápido posible y todo es una sola cosa y esa cosa es una fusión de músculos caños huesos metales plásticos un mundo único solitario no hay nadie transpirar transpirar arde la vista arde la vista duelen las piernas arde la vista duele la panza pedalear el viento no seca la transpiración seca la garganta la boca seca la visión ya no es nítida todo se ve borroso como el cemento que pasa rápido por debajo y ya no se siente más nada es todo silencio es el tun tun tun tun del corazón y agachar la cabeza seguir sin mirar sin levantar la vista hasta que una mancha blanca pasa rápido por abajo así como un flash y una bandera a cuadros que no se ve pero se sabe que alguien que no se conoce la baja violentamente y es todo silencio y de golpe las piernas se detienen y se levanta la cabeza y se abren grandes los ojos y la boca igual que cuando se saca la cabeza de abajo del agua antes de ahogarse y se deja de paladear.

La ola verde

Rojo

piso
el freno

con el índice
izquierdo
bajo
el vidrio
ella
se acerca
con su hija
a upa
no saco
mi mano
no mete
su mano
ahí
la ventanilla
el límite
el adentro
el afuera

rojo

piso
el freno

la esquina
un cubo mágico
sin resolver
de uno
de los cuadrados
rueda
un tomate
rueda
por la vereda
rueda
por la calle
muere
aplastado
por una
rueda

rojo

piso
el freno

rojas
las luces
traseras
se encienden
la chapa
se abolla
múltiples
pedacitos
plásticos
rojos
por el piso
me bajo
me acerco
su índice
izquierdo
baja
el vidrio
no hay
límite
no hay
adentro
no hay
afuera

mi mano

su nariz

el tomate

Este oeste

Un flaco
en una tabla
flota
inutilmente
entre olitas

un flaco
en un autito
por la arena
se encaja
una
dos
tres veces

un flaco
en un paramotor
vuela
sobre la costa

yo
no espero
la ola
de mi vida
ni cruzar
un médano
tampoco
el océano

sólo
                                  miro
el mar
por la ventana

no busco
nada
es sólo
que el mar
está de un lado
y yo
del otro.